La prohibición de vender cerveza o “calimocho”
a los puestos de las fiestas implica el monopolio y favorece el botellón.
El equipo de gobierno del PP ha preparado una modificación
de ordenanzas municipales cuyo objetivo es el de favorecer los negocios de
quienes sistemáticamente bienen siendo adjudicatarios de las barras de bebidas
que se instalan en la Plaza Mayor con motivo de las fiestas locales, así como
del bar de los Carnavales en el Polideportivo, en un procedimiento de
adjudicación que como poco, podría calificarse de poco transparente.
Esta modificación de ordenanzas consiste en que para obtener
la licencia para instalar una caseta en las fiestas patronales se va a exigir
como requisito imprescindible, un “compromiso de que no se va a vender bebidas
alcohólicas”. El objetivo de imponer este requisito no es otro que el de dejar
el monopolio para poder vender este tipo de bebidas a los concesionarios de las
barras de la Plaza Mayor; impidiendo su venta tanto al resto de los feriantes, como
a los bares y asociaciones que quieran poner una caseta en el recinto ferial.
El argumento esgrimido por la concejala de festejos de que
había habido protestas de los propietarios de los bares de Hoyo, “no sólo es totalmente falso, si no
que los hosteleros con los que ha hablado Izquierda Unida, no sólo señalan que
no les afecta, sino que están indignados con la medida”, señala Izquierda Unida.
Con esta prohibición a favor de los de siempre, no sólo se
perjudica a los feriantes y a las asociaciones que ponen puestos en la ferias
con el objetivo principal, no de obtener beneficios, pues estos son muy
limitados por los precios populares que ponen; también se perjudica a los
vecinos que se van a ver obligados a adquirir sus bebidas en un solo sitio y a
precios elevados, con lo que se favorecerá la proliferación del botellón,
principalmente entre los jóvenes.
Como curiosidad final “a quienes sistemáticamente se les
concede la explotación de la barras de bebidas durante las fiestas en la plaza
y que a favor de quien está pensada esta medida, son los mismos que quieren
instalar un bar en el número 11 de la Plaza Mayor, por lo que además de
destrozar el lugar más emblemático del pueblo, tendrían ya el monopolio
absoluto de venta de bebidas en las fiestas; aunque para ello el Partido Popular
tenga cambiar ordenanzas en su beneficio y permita la mercantilización de una
de las más bellas Plazas de la Sierra” señala el portavoz de Izquierda Unida y
candidato a la Alcaldía, José Ramón Mendoza que añade que que
añade que “el PP quiere dejar todo atado y bien atado para los suyos; está cada
vez más claro que hay que transformar Hoyo”.
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