viernes, 6 de febrero de 2015

Hoyo de Manzanares. ¡Que vienen los rusos!

Del equipo de gobierno ppero, esta escribió una infamiacontra trabajadores municipales, este la utilizó para satisfacer intereses privados, este la voceó con nocturnidad y alevosía y todos, toditos, juntos, juntitos, se negaron a actuar éticamente y reparar el daño causado.
Como el asunto es tan cabreante prefiero escribir sobre una película que me gusta mucho; ¡Que vienen los rusos!Se trata de una comedia norteamericana rodada y ambientada en plena guerra fría, allá por mediados de los sesenta del siglo pasado, que cuenta las andanzas de los vecinos de un pequeño pueblo costero de Estados Unidos y la tripulación de un submarino de la extinta Unión Soviética cuando éste encalla en su litoral. Los primeros piensan que los rusos han venido a invadirles mientras que los marineros solo intentan encontrar la manera de desencallar su nave lo antes posible ante el temor de ser apresados, o lo que es peor, echados al pilón, si es que hay pilones en los pequeños pueblos costeros yanquis.La situación da lugar a una sucesión de hilarantes peripecias,de los lugareños preparándose para la defensa por un lado y de los militares infiltrándose en territorio hostil, buscando un barco para remolcar su submarino, por otro. Cuando se produce el ineludible encuentro entre ambos bandos parece inevitable un cruento desenlace, pero una situación de peligro de un niño de la vecindad cambia las circunstancias y produce que todos cooperen para salvarle. No contaré el final para no fastidiar a quien quiera ver la peli, pero diré que el buen ánimo, capacidad de trabajo en equipo y esfuerzo de los moradores unido a la imaginación, organización, rigor y disciplina de los navegantes, hará que el trance tenga un final feliz.
  Desde el humor este  filme refleja las suspicacias que se producen entre los seres humanos por causa del desconocimiento, que a la postre las personas normales y decentes  tendemos mas al entendimiento que a la confrontación en los asuntos de mutuo interés y que la colaboración da los mejores resultados para la consecución de metas y objetivos que beneficien a la mayoría.
 Es una película muy divertida y apta para todos los públicos. La recomiendo.
José Ignacio Álvarez.

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